miércoles, 28 de noviembre de 2012

Critica al Derecho a decidir como legitimación

 

En Cataluña se lleva planteando el problema o la cuestión del derecho a decidir o autodeterminación de los pueblos des de que se planteo la nueva panacea o la idea de una nación emancipada y alejada de los influjos o intervenciones de un estado central o centralista llamado España (así, como totalidad hegemónica y no dispar o heterónoma, lo sueltan sin más); dicha idea de nación identitarea , ya que es a lo que se apela y se espera respuesta del pueblo a este estímulo, es fundamentada bajo el principio o derecho a decidir de un colectivo sobre su futuro, su estructura política o constitución de lo constituido, así pues se apela a esta máxima, a este concepto formal de manera discriminatoria, ya que discriminan contexto, situación y circunstancias, motivos o intereses de tal decisión de autodeterminación o autonomía y no solo los motivos que conducen a tal planteamiento sino que la propia fundamentación y legitimación de tales motivos, pulsiones, intenciones o intereses que conducen a tal fin.

Por lo tanto se apela a un principio sin dar argumentos o razones suficientes para constituir un concepto o tesis que sostenga la materialización de tal acción política, apelan a la democracia para legitimar su principio a un consenso no debatido sino elegido por la fuerza de la mayoría y acusan a los no partidarios de democratizar hasta la hora de tomar el café, de anti-demócratas, situándolos sin escapatoria en su contrario, en la tiranía por lo tanto absolutistas o dictatoriales contrarios al derecho a decidir, así es el movimiento de clasificación por parte tanto de los poderes políticos y grupos discursivos, esto es, los partidos políticos, los grupos de comunicación partidarios del pensamiento partidista y de trinchera que esgrimen un discurso hegemónico altamente normativizado y encasillador, que infringe unas normas o máximas inquebrantables a seguir, y si escapas de ellas con cualquier otra postura eres un desertor a la patria, al sistema que la rige (la democracia), los órganos organizativos y controladores ( instituciones u organizaciones públicas) y a la decisión del pueblo (como si estuviera decidida de antemano y fuera compartida y hegemónica).

Por lo tanto el principio de autodeterminación o autonomía ha quedado secuestrado y raptado por los órganos de poder  que lo han re-configurado, re-definido, conformado y postulado a partir de sus presupuestos de manera simplificadora y superficial con una intención por un lado, destructora y deslegitimadora de todo lo que escape a sus dominios, límites, principios o formulaciones constitutivas,  y por otro lado obliga a sujetos, individuos o colectivos a optar por una opción u otra, les conduce hasta tal límite de decisión que solo tienen dos opciones para escoger, no cave más argumentación posible que lo planteado por las fuerzas de poder, es decir o el "sí" a la autodeterminación o el "no", obviamente eliminando toda posibilidad de salir airoso si se opta  por el "no", en ese caso el sujeto, individuo o colectivo que defienda esa postura es tildado de lo peor, de anti-demócrata, totalitario, dictatorial y todo lo ello conlleva.

Estamos pues ante un rapto de un concepto manipulado, tergiversado y dirigido para unos fines por parte de un o unos grupos interesados en mantener tales formulaciones para justificar, que no justifica, unos fines concretos, unos proyectos de estructura política colectivos en una sociedad, de se rapto y manipulación no solo participan las propias fuerzas manipuladoras de poder que tiene la capacidad y los medios para modificar y situar al sujeto, individuo o al colectivo minoritario contrario o heterodoxo en una situación muy limitada y poco óptima para el debate realmente alternativo, profundo o incluso filosófico, sino que también participan esos individuos, ciudadanos, sujetos o elementos y componentes sociales individuales que pertenecen a ese pueblo en general y aceptan tal nomenclatura, tal orden conceptual y tal posición decisiva, así entran a formar parte del mismo campo semántico teórico-conceptual de los que mal plantean el problema, lo simplifican, des-sustantivan, des-significan y ofrecen pocos rincones de reflexión, es decir distancia y objetividad, visión de conjunto del teman.

Los que buscan tal objetivo, partidos políticos, grupos empresariales  y colectivos o asociaciones civiles o sociales que mezclan sentimientos de apego, viscerales, identidades y demás no sólo conducen al individuo a decidir dentro de sus parámetros y límites, sino que en la inmediatez e interioridad del problema, no permiten ese movimiento de la reflexión, que es el de salir de si, alejarse y distanciarse de la interioridad del problema para verlo des de lejos, des de fuera, con una visión consciente y "objetiva", una visión de conjunto analizada en frío y no en caliente, sino que obligan a estar en la interioridad, en la inmediatez y abogando por un juez supremo que dicta lo bueno y lo malo, que es la tiranía de las mayorías (democracia).

Así pues postulo que son las fuerzas de dominio y poder en sus diversas formas en Cataluña las que conducen tal ideal nacional a su propio lenguaje bajo sus propias leyes y normas, no aceptando nada que este fuera de ellas e imposibilitando el debate, la problematización y reflexión del mismo des de puntos de vista que no sean favorables a su fin, así pues uno se declara contrario al derecho a decidir tal y como se ha planteado en Cataluña puesto que solo aceptaría la independencia o derecho a decidir o auto-determinarse si las condiciones el contexto y los motivos bien fundamentados derivasen a ese extremo, por lo tanto si el país fuese colonizado, explotado, oprimido u otros argumentos que se necesitarían matizar con detalle y atención dependiendo de la contingencia, puesto que la situación actual por la que se plantea el debate la he objetado, a mi juicio queda desvirtuada y negada y no cave más camino posible, si se quiere luchar contra desigualdades, sistemas opresores u otras motivaciones u objetos de confrontación debe ser desde el cambio de estructura  política nacional, mediante una acción política real y nacional (en el sentido de estatal), igual que si hubiera una confrontación entre partes en un estado catalán independiente se haría.












jueves, 22 de noviembre de 2012

La trastienda del Nacionalismo



A uno se le caen los palos del sombrajo, uno se sorprende de la gran influencia de la propaganda claramente populista, apasionada visceral, exaltada e inflamada del nacionalismo más pueril e infantil que invade y llega a  todas las capas de la sociedad:  la vida cotidiana de barrio, de la realidad universitaria en una facultad de filosofía ( en teoría crítica y escéptica) en cafeterías y aulas de escuelas de idiomas y demás lugares por los que uno transita a lo largo del día, lleva días ya invadiendo nuestras vidas de manera agresiva, intimidatoria y realmente acaparadora y neurótica, este delirio colectivo de distintos grupusculos, colectivos y agrupaciones insertados en distintas capas, clases o medios de la sociedad que se dedican a defender una panacea ficticia, un camino al nirvana inexistente y una promesa del paraíso perdido y de la vida eterna para beatos.

El nacionalismo no es más que la abstracción de un sentimiento muy primitivo de localismo, posesión y dominación, un sentir territorial casi animal, que defiende lo suyo porque cree que es suyo y tiene derecho a su uso y abuso, porque creen que la cultura folclórica, de colorete, de postín, la popular y vulgar es algo propio y de valor ontológico que les otorga identidad deben conservar ante el invasor, el nacionalismo no hace nada más que englobar a toda la razón de un pueblo bajo un mismo umbral, una sola idea falta de fundamentación racional, basada en un pensamiento hegemónico, simple y llano, falto de una estructura política o ideológica profunda que conforma un eslogan barato que exalta a las gentes y juega con sus sentimientos al prometer una tierra mejor y más prospera en tiempos de crisis, papilla que se traga todo aquel que no reflexione sobre el asunto.

El nacionalismo en genérico, el nacionalismo visto en retrospectiva y basándonos en antecedentes históricos ha ido siempre ligado a los fascismos, es caldo de cultivo, condición necesaria para ellos, estas "pseudoideas" de nación totalizadora, emancipadora y auto-suficiente y competente no llevan más que al estrepitoso fracaso.

El nacionalismo es hoy en España y todas sus comunidades, el opio del pueblo, enajena su voluntad, adormece la sociedad, liquida toda posibilidad de razón crítica individual, secuestra la razón pública común, devuelva a los ciudadanos a un estado de minoría de edad, de irresponsabilidad, una situación cultural reaccionaria, represiva y limitada, muy limitada, se conduce ese mismo pueblo que adapta una postura nacionalista a una sociedad y cultura  pre-ilustrada, pre-crítica, mítica, a un estado conservador que busca viejas formas de poder y viejos y antiguos métodos de control, parece un camino progresivo y ascendente y no es más que un espejismo que conduce al abismo del pasado y el retroceso intelectual.

Esto lo consiguen gracias a prometer el mico y el loro, a la exaltación por la creación de un estado nuevo y autónomo, uno, grande y libre (como la España franquista) a usar todas las fuerzas de presión mediáticas y medios de comunicación, de grandes plataformas públicas para insertar la confrontación y fomentar el odio entre ciudadanos, prometer la panacea, el elixir de la eterna juventud, y el paraíso perdido, prometer una identidad racial, cultural y política únicas, un estado más justo, más libre e igualitario, más rico y prospero.

Todo son castillos de arena, ficciones del paraíso, ingenuidades insultante y ofensivas que no son reales, ya he expuesto a mi juicio, como funciona el engranaje de tal abstracción  ambigua, banal, simple, trivial, y débil intelectualmente,  de la idea de nación y su sentimiento y palpitación irrisoria, ya he expuesto las vergüenzas de la idea misma, de manera teórica y abstracta, pero concreta-mente, particularmente en Cataluña la incidencia de tal influencia idealista de la nación cala hondo en todos los sectores de la sociedad, incluso los que admiten y se inscriben en su crítica fulminante votarán a nivel práctico partidos de tal enjundia, alegando que es más práctica y que de todos modos algo bueno aportará, basándose en la nada y en la inconsistencia e insuficiencia lógica y racional, un insulto a la inteligencia es aceptar tales críticas y votar un partido independentista o nacionalista, puesto que aquí y ahora, en este lugar y en esta situación y condiciones, en este contexto en Cataluña no hay partido independentista no nacionalista, y si lo hubiera no tendría razón de ser, puesto que solo es justificable y razonable si es un pueblo oprimido o colonizado que quiere liberarse, cosa harto exagerada si se aplica en la relación Cataluña España actual.

Así pues deberé contemplar ante mi asombro y descontento, como mentes brillantes de mi entorno, de mi cercanía o de mi conocer se inclinan ante tal superflua idea, como se dejan engañar por ideas tan poco construidas, completas, excelsas  o profundas, por no decir falsas, cayendo a los pies de la inocencia e ignorancia más absolutas.











domingo, 4 de noviembre de 2012

¿SÓCRATES, EL PADRE DE LA FILOSOFIA?



Cuando hablamos de esa noble y bella tradición que es la filosofía a uno se le viene a la mente el problema de situar el inicio de tal humilde actividad, sus principios, dónde situar el territorio, las gentes y los pueblos que la cultivaron y la iniciaron, plantearse el problema de su causa, no ya observar su efecto, puesto que obvio se nos presenta, pero si cual fue su causa, el punto de inflexión de pasar de un cúmulo de mitos e ideas trasmitidos de generación en generación a una verdadera actividad del "logos", del pensamiento racional, crítico reflexivo.

Esto es pues, pasar de una forma de saber y pensamiento de acumulación de historias de ficción que explicarían el porqué de las cosas basándose en algo superior al hombre al que cave rendir homenaje y sumisión por su poder creador o sobrehumano, una forma de pensamiento mítico, narrativo basado en un pasado lejano que explicaría el hoy, en una acumulación de ideas que darían cuenta de las explicaciones del mundo de una manera confusa, poco precisa o rigurosa en su argumentación lógica, creativa, boscosa, oscura, poética y por lo tanto interpretable y sobre todo idealizada, basada en grandes ideales conformados en sus mentes des de las alturas divinas que aplicarían a la realidad para explicar su porqué, conformarla, constituirla  y cerrar su misterio y  un pensamiento, inconsciente, pasional y sentimental como motor y  generador del saber y el pensar.

Todo lo contrario al pensamiento que propone Sócrates al ejercerlo, denominado por Nietzsche como el  racionalismo socrático ( que él tanto detestaba), basado en la racionalidad,  un proceso de argumentación lógica, consciente, reflexiva, crítica, metodológica, conceptual y abstracta, capaz de sostener teorías y postular tesis con pretensiones de verdad, es decir de explicar los hechos y las cosas con la realidad como referente de conocimiento y verdad.

Así pues se distingue las dos clases de pensamiento en el origen del mismo en la Grecia clásica como los contrarios mito y logos, llamado: el proceso del mito al logos, que aparece en todos los manuales de historia o introducción de la filosofía, y así es como se considera por consenso y de manera aceptada por todos el origen de la filosofía, pasar del pensamiento mítico, ficticio o narrativo anclado en el pasado al pensamiento racional, lógico, argumentativo y centrado en expresarse en el presente, se encuentra esa distinción esa ruptura o trasvase de un tipo de pensar y saber a otro, en el mismo proceso de escritura, en la tradición escrita, en los géneros "literarios" de la época clásica, se identifica con el pensamiento de los poetas trágicos o del drama musical griego ( como dice Nietzsche) el pensamiento mítico, conducido fecundizado y continuado por Homero, Sófocles, Esquilo, los rapsodas o sofistas y como pensamiento racional o basado en el logos ( razón)  el pensamiento socrático, el nuevo género de la comedia ática de Eurípides (influenciado por el primero) y el género de los diálogos de Platón.

Esta época en que se produce una ruptura, una escisión del hombre conocedor al hombre pensante es conocida como la primera ilustración, es decir la victoria o implantación  de la razón como método de conocer, saber y pensar, como clasificación y explicación del mundo, que comporta una nueva visión abstracta, de conjunto y estructural de la realidad, la vida y el universo.

Así pues considero acertado el entender o concebir a Sócrtaes y Platón como los primeros filósofos, puesto que cierto es que en todas las culturas (esto es tradiciones y costumbres) sociedades y épocas existía el saber, el conocimiento, poseían cúmulos de ideas en forma de relatos, narraciones o poemas trágicos, una física, astrología o conocimiento sobre lo natural, pero no poseían lo que la cultura griega ya atisbó y vislumbró con los preosocráticos pero que culminó y se re-definió con Sócrates y Platón, que son esos elementos esenciales como: la reflexión, (es decir un pensar sobre el mismo pensar, ese movimiento de salir de uno mismo y el mundo mismo para cuestionarlo y examinarlo críticamente, esa idea crítica sobre las ideas) la creación de la consciencia ( en el sentido de saberse a uno mismo, el preguntarse por el hombre por el propio yo, de manera introspectiva) con el "conócete a ti mismo" socrático, tomado del oráculo de Delfos, la creación de los diálogos que comportaban la competición por la verdad, el problematizar y polemizar sobre los asuntos del saber y conocer, véase la realidad, el debate y la definición de los principios. El método socrático que introduce la idea de interrogación de la realidad y lo supuesta-mente sabido como proceso de demolición y destrucción de lo establecido como verdadero y real y clasificado como saber, introduce pues la idea de plantearse las preguntas antes que las respuestas y ese escepticismo frente a la realidad y su verdad, esa destrucción de lo construido sobre barro y arnas movedizas.

Podemos concluir que lo que hoy entendemos por filosofía es la actividad que ejercían Sócrtaes y Platón y que podemos ver señales en algunos presocráticos y sus textos, esa concepción de la filosofía como interrogación y preguntas, como conceptualización, reflexión y crítica, visión de conjunto y ese intento de derrocar lo establecido, destruir lo construido en bases poco sólidas, un saber distinto al saber enciclopédico, tradicional o cultural de acumulación y depósitos de saber  con ideas sin examinar o interrogar, por lo tanto coincido y considero a  Sócrates como el padre de la actividad o ejercicio filosófico en esencia como tal.